Morgan Stanley ha tomado una decisión contundente al rebajar la calificación de México a “Underweight” en su cartera modelo para América Latina. Esta medida se da en un contexto de creciente incertidumbre tras la reciente propuesta de reforma judicial enviada por el Ejecutivo al Congreso mexicano. Según el análisis de la firma, esta reforma incrementaría significativamente los riesgos asociados a la inversión en el país, elevando la prima de riesgo y limitando las inversiones de capital (capex), justo cuando el “nearshoring” está alcanzando cuellos de botella críticos.
Impacto en la Inversión: Reducción de Exposición en Acciones Mexicanas
Como resultado de esta rebaja, Morgan Stanley ha decidido reducir el peso de importantes activos mexicanos en su cartera modelo, afectando a gigantes como Walmex, Femsa y Coca-Cola Femsa. Además, la firma ha eliminado por completo de su cartera a otras empresas clave como Kimberly Clark México, Laureate y Qualitas, reflejando una postura más cautelosa frente a la economía mexicana.
Cambio de Estrategia: Enfoque en Brasil y Sectores Clave
A pesar de la rebaja, Morgan Stanley mantiene su enfoque en sectores estratégicos como digitalización, energía y agricultura, especialmente en Brasil, donde ven un fuerte potencial de crecimiento a largo plazo. La firma destaca la expansión de las fronteras energéticas y agrícolas de Brasil como un motor clave para su cartera en la región.
Preocupaciones Crecientes
El informe subraya la falta de progresos en la política interna de México y el riesgo político asociado a la reforma judicial como factores que podrían afectar negativamente la estabilidad del mercado mexicano y la percepción de los inversores. Con estas preocupaciones en mente, Morgan Stanley opta por una postura más defensiva, ajustando su estrategia de inversión en México y reforzando su enfoque en mercados más prometedores de la región.