El clima político en México ha afectado de manera notable al mercado cambiario, ya que el peso mexicano se debilitó frente al dólar, superando el “nivel psicológico” de 20 unidades por dólar en la mañana del 10 de septiembre. Este retroceso se atribuye a la incertidumbre generada por la presión sobre el senador Miguel Ángel Yunes, quien no ha revelado su postura respecto a la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
La Alianza Opositora en Riesgo
La semana pasada, los senadores del PRI, PAN y Movimiento Ciudadano anunciaron un bloque de contención en contra de la reforma al Poder Judicial, comprometiendo 43 votos en contra de la iniciativa. Esta noticia generó optimismo en los mercados y ayudó al peso a apreciarse el lunes 9 de septiembre. Sin embargo, la alianza parece estar en peligro debido a rumores de que Yunes, exgobernador de Veracruz y figura clave dentro del PAN, podría haberse alineado con la bancada de la Cuarta Transformación.
Los senadores del PAN convocaron a una reunión en la tarde del 10 de septiembre para aclarar la situación, pero la ausencia de Yunes alimentó aún más las especulaciones sobre un posible cambio de postura.
Impacto en el Peso Mexicano
La incertidumbre política ha provocado que los inversores se muestren cautelosos, lo que ha llevado a la depreciación del peso mexicano. El tipo de cambio, que durante semanas se había mantenido por debajo de las 20 unidades por dólar, superó ese umbral ante los crecientes rumores y tensiones en el Senado.
El mercado financiero estará atento a las próximas decisiones de los legisladores y, en particular, a la postura de Yunes, que podría ser determinante para el futuro de la reforma judicial y la estabilidad del peso mexicano.