El Congreso del Estado de Durango aprobó la reforma constitucional que prohíbe el maíz transgénico en el país, con el objetivo de salvaguardar las variedades nativas y garantizar la soberanía alimentaria de México.
La iniciativa, promovida por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, busca proteger las 59 razas de maíz que se cultivan en el territorio nacional. El dictamen, elaborado por la Comisión de Puntos Constitucionales, destaca que la modificación genética del maíz no solo altera su estructura biológica, sino que también impacta su valor cultural y gastronómico.
Con esta aprobación, Durango se suma al respaldo de la reforma, que establece la preservación del maíz nativo como un pilar fundamental para una alimentación nutritiva, suficiente y culturalmente adecuada.
La medida refuerza el compromiso del país con la protección de su biodiversidad agrícola y el reconocimiento del maíz como patrimonio biocultural de México.
