El peso mexicano comenzó las operaciones del jueves con una nota positiva, mostrando signos de recuperación luego de una jornada volátil y ante la expectativa de cambios en la política estadounidense. La divisa nacional se mueve hacia su mejor nivel en más de tres semanas, con el tipo de cambio aproximándose a 19.8 unidades por dólar, lo que de mantenerse podría llevarlo a cerrar por debajo del nivel psicológico de 20 unidades por dólar, un hito que no ha alcanzado en los últimos ocho días.
Contexto de la Recuperación: Expectativas de Política en Estados Unidos
La reciente volatilidad del peso ha estado influida en gran medida por las elecciones presidenciales en Estados Unidos, en las que el candidato republicano, Donald Trump, ha tomado ventaja en algunos análisis y apuestas. Durante las últimas semanas, el mercado mexicano y el peso incorporaron una posible victoria de Trump, lo que generó presión en la moneda ante la expectativa de políticas estadounidenses que pudieran impactar el flujo comercial y económico entre ambas naciones.
Sin embargo, con el panorama electoral más claro, los inversionistas se centran ahora en las acciones concretas que el candidato pueda tomar en su eventual administración. Este cambio de enfoque ha dado un respiro al peso, que podría experimentar una estabilización en el corto plazo.
Perspectivas para el Peso: ¿Se Mantendrá el Impulso?
El impulso que ha mostrado el peso en la apertura de la jornada se debe a varios factores que podrían consolidarse si las condiciones se mantienen. Analistas señalan que el peso podría cerrar la sesión con una apreciación que lo ubique por debajo de 20 unidades por dólar, una cifra clave para los inversionistas. Este nivel psicológico es importante ya que podría indicar una mejora en la percepción del riesgo y en la estabilidad económica de México frente a los cambios en la política exterior de su principal socio comercial.
Además, la expectativa sobre las políticas monetarias tanto de Estados Unidos como de México juega un papel fundamental. Si bien los bancos centrales de ambos países han mantenido sus tasas de interés estables, cualquier indicio de cambio podría influir en el comportamiento de los inversionistas y en el tipo de cambio. La Reserva Federal ha dejado en claro que evaluará el desempeño económico antes de tomar decisiones adicionales, lo que podría traducirse en un contexto más estable para el peso.
Impacto en la Economía Mexicana y el Comercio Internacional
La apreciación del peso beneficia no solo al mercado financiero sino también a diversas áreas de la economía mexicana. Un tipo de cambio más favorable puede reducir los costos de importación, lo que a su vez podría ayudar a controlar la inflación en los bienes y servicios importados. Asimismo, los sectores que dependen del comercio internacional, especialmente aquellos que importan maquinaria y materias primas, pueden ver una mejora en sus márgenes de ganancia.
Por otro lado, una recuperación del peso también ofrece beneficios para el turismo, ya que fortalece el poder adquisitivo de los visitantes y fomenta el turismo nacional, un sector relevante para la economía mexicana.
Expectativa de Estabilidad a Mediano Plazo
Los analistas consideran que, si el tipo de cambio logra estabilizarse por debajo de las 20 unidades por dólar, esto podría significar una tendencia positiva hacia la estabilidad cambiaria en las próximas semanas. Aunque persisten factores de riesgo, como las políticas de comercio y migración en Estados Unidos, la estabilidad actual del peso sugiere una moderación en las fluctuaciones intensas que se han experimentado recientemente.
Con una perspectiva a mediano plazo, la recuperación del peso puede depender también de las decisiones del gobierno mexicano para fomentar un entorno económico estable y atraer inversión extranjera, además del seguimiento que haga el Banco de México a las condiciones inflacionarias y a la política monetaria de su vecino del norte.