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En Hollywood, a veces ocurren coincidencias tan sorprendentes que parecen estar planificadas, aunque no lo estén. Películas con ideas y premisas similares suelen estrenarse en fechas cercanas, lo que puede dar la impresión de que es intencional, pero realmente refleja la naturaleza impredecible de la creatividad.

Este año, lo hemos visto con dos películas de terror ambientadas en conventos: La primera profecía e Immaculate. Esta última, protagonizada por Sydney Sweeney y Álvaro Morte, ha llegado recientemente a Prime Video, brindando una excelente opción para una noche de cine aterradora y memorable.

Cecilia, una joven novicia convencida de que Dios la salvó por una razón, decide dejar atrás su vida en Estados Unidos para convertirse en monja en un convento italiano. A lo largo de su vida, ha intentado explicar el milagro que cambió su destino, y ahora está decidida a dedicarse plenamente a su fe.

No obstante, justo después de tomar sus votos, Cecilia comienza a experimentar pesadillas perturbadoras y visiones inquietantes que siembran dudas en su mente. Además, unas inexplicables náuseas matutinas generan especulaciones entre quienes la rodean. Pero, como dicen, Dios tiene un plan para todos. Sin embargo, en el caso de Cecilia, parece que la oscuridad tiene la última palabra.

Immaculate: Horror en el convento

Filmada en locaciones reales en Italia, incluyendo la icónica Villa Parisi, donde se rodaron clásicos del terror como Bahía de sangre y Sangre para Drácula, Immaculate ofrece una interesante actualización del género “nunsploitation”. Este subgénero se caracteriza por tener a monjas como protagonistas y una posible presencia demoníaca que amenaza con desatar una sangrienta masacre.

Aunque su premisa es similar a la de La primera profecía, Immaculate se destaca por ser más festiva y orientada al terror mainstream, logrando ser una propuesta entretenida y bien elaborada. Además, cuenta con una interpretación destacada de Sydney Sweeney, que consolida su lugar como una de las nuevas reinas del grito.